Ahora resulta que para querer que un equipo argentino gane en un Mundial, todos aquellos que practiquen ese deporte deben ser buenas personas.
En veinte años hablaremos del River-Boca del penal que atajó Barovero. Podemos darle las vueltas que quieran, pero el clásico se definió por esa jugada, a los 30 segundos del...
Algunos equipos entendieron mal la regla de los goles de visitante. En lugar de arriesgar cuando salen de casa, cuidan más su arco cuando son locales. Así no va.
De cara al superclásico de Copa Sudamericana, en medio de pronósticos de paridad y mucha timidez, Pablo Cheb se pone la camiseta de Boca y explica por qué será el vencedor.
La pifia de Funes Mori que permitió el empate de Olimpo viene precedida por traicionar el fútbol que pregona el técnico de River. El error fue de concepto.
Alina se entrega a la lógica de subrayar su belleza y no su capacidad.
Sí, el título es un poco fuerte. Pero resume la furiosa perplejidad del autor de la nota por el uso de la "pasión" para dignificar la estupidez, la crueldad y la violencia.
Moyano, presidente de Independiente, está a los besos con Macri y se intercambian favores. La tentación de usar el éxito del fútbol para provecho personal en la política.
Newell's y River actuaron distinto ante la misma situación.
Los entrenadores viven escudándose en excusas para justificar las malas actuaciones. Un ejemplo claro es lo que pasa en San Lorenzo con Edgardo Bauza.
Hubo un tiempo en que lo peor que le podía pasar a un árbitro era que le acertaran un botellazo en la cabeza. Hoy, lo pueden designar para un River-Boca. ¡Qué inseguridad!