Esperando la final, la horas no pasan nunca y nuestro hombre en Brasil, desvelado, incurre en polémicos desvaríos
Esperando la final, la horas no pasan nunca y nuestro hombre en Brasil, desvelado, incurre en polémicos desvaríos
Brasil nunca estuvo tan uruguaya como ayer. Desde Medio y Medio, reporta nuestro enviado especial mundialista.
Nuestro enviado especial de bajo presupuesto exploró sus raíces vascas para festejar en grupo la derrota de España.
Nuestro cronista se despide de (la Avenida) Brasil y se vuelve amargado a su Ameghino natal, pero ilusionado ya en Rusia 2018.
La final se palpita a full en "Saudade", la pensión que el enviado especial de Un Caño habita desde hace un mes, desde el comienzo del Mundial.
Una mala noticia. El enviado especial de Un Caño a la Avenida Brasil fue embaucado otra vez por un espía alemán.
No valía la pena sufrir con la semifinal de Argentina, estaba todo armado por la FIFA. Era obvio.
Una revelación de nuestro enviado: el partido Argentina-Holanda ya se jugó. A que no adivinan quién ganó.
Máxima va a hinchar por Argentina.
Nuestro corresponsal no duda en entrar en cualquier componenda con tal de conseguir un ticket para ver la final en lugar de los hechos.