Entontecer a la gente. Muchas veces ésta parece ser la premisa del fútbol argentino y todo lo que lo rodea. Desde las promesas políticas absurdas hasta el cotidiano “hay que ganar como sea” del jugador que se topa con un micrófono.
Ya no nos resulta extraño que desde un programa deportivo instalen la supuesta polémica si “ganar o jugar bien”. Si hacés esta pregunta, siendo periodista o no, es por dos razones: 1) no te estás tomando la molestia de pensar o 2) serías capaz de no jugar un partido con tal de que te lo den por ganado. Se entiende lo de los programas.La gente compra boludeces entonces venden boludeces.
Lo que no se entendió fue la conferencia de prensa de Edgardo Bauza después de perder con San Martín de San Juan.
“Nunca se juega bien cuando se pierde”, dijo. Y estamos de acuerdo. San Lorenzo hizo algunas cosas bien, pero tuvo cien chances y metió una y el rival tuvo tres y metió dos: falló en la definición y en defensa.
“Jugando así van a ser más los partidos que vamos a ganar que los que vamos a perder”, dijo el Patón. Y estamos de acuerdo. La noche del sábado, Carlos Mayor, técnico de San Martín, la habrá terminado más feliz que Bauza. Sin embargo, un torneo de todos contra todos no se acaba en un partido y, si se repite lo del sábado, seguramente Bauza terminará muchas veces más feliz que su colega.
“Ojalá juguemos mal el miércoles (con Corinthians) y podamos ganar”, dijo el Patón. Y acá se quemaron todos los papeles.
Para resumir qué es jugar bien se podría decir: un plan de juego eficiente y poder llevarlo a cabo. Mourinho y Guardiola ganaron torneos en distintas Ligas con diferentes sistemas, pero los dos eficientes. Después, cada uno decidirá de acuerdo a su estética cuál le gusta más. Jugar mal, obvio, sería todo lo contrario: no tener ningún plan. O no poder plasmarlo.
Entonces, qué les va a decir Bauza a sus jugadores antes de enfrentar al Corinthians. ¿Les va a pedir que hagan todo lo que practicaron porque practicaron para jugar mal o, como hicieron unos entrenamientos estupendos, les dirá que hagan todo lo contrario?
Sí, está bien, lo de Bauza fue una chicana. No se le puede escapar una contradicción semejante a un técnico que se jacta de tener todo estudiado. En menos de un minuto dijo que “nunca se juega bien cuando se pierde” y “ojalá juguemos mal y ganemos”.
Es entendible lo que le pasa al Patón. Recién pasaron seis meses de la Libertadores y cualquier técnico estaría dolido porque sus propios hinchas, después de que les haya cumplido el sueño de sus vidas futboleras, ya le están reprochando algunos planteos. Pero eso no significa decir cualquier pavada, aunque no falte costumbre.
