Todo sigue en veremos en la AFA. Por lo menos hasta hoy, jueves 17 de diciembre de 2015, cuando nuevamente se junten las partes de los dos sectores en pugna (seguristas y tinellistas) para tratar de acordar una salida negociada al conflicto que ya lleva dos semanas, más exactamente desde el día del papelón de la fallida votación. Para que los sufran el síndrome de Memento, les recordamos que fue aquella en la que Luis Segura y Marcelo Tinelli igualaron en 38 votos cuando había 75 asambleístas. Es decir, sobró uno.
Pero para contar algo de la madeja que pacientemente están tratando de desenredar, digamos que el Juzgado Nacional de primera instancia número 57 hizo lugar ayer a la medida cautelar presentada por Independiente Rivadavia de Mendoza (tinellista) para que se suspendiera la asamblea que se iba a celebrar el viernes 18 de diciembre de 2015 a las 18 y en la que los seguristas querían que se eligiera al próximo presidente de AFA, otra vez por votación secreta. Por la tanto, la elección no se va a realizar y de esa manera, los aliados de Tinelli lograron frenar a los de Segura, quienes se querían aprovechar de la ausencia de los dirigentes de River (tinellistas) para rapiñar un voto.
La cautelar llegó en el preciso momento en que Segura y los suyos estaban analizando una propuesta del otro bando que establecía: a) suspender por 60 días las elecciones, b) que Segura quedara como presidente de la AFA y c) que el gobierno fuera ejercido por un grupo de seis directivos (tres del bando de Tinelli y tres del de Segura). Esta proposición le había sido entregada a los seguristas ayer por la mañana y la estaban analizando.
Incluso se había acordado entre los grupos vetar a dos dirigentes de la conducción colegiada, ya que sus presencias eran consideradas irritantes para unos y otros. Se trataba de Eduardo Spinosa, de Banfield, y de Claudio Chiqui Tapia, de Barracas Central. En el Grupo de los 6 no iban a estar ninguno de los dos. Por la lado de Tinelli habían propuesto a Lammens (San Lorenzo), D’Onofrio (River) y Verón (Estudiantes). Del lado de segura sugerían a Angelici (Boca), Blanco (Racing) y Moyano (Independiente).
Pero la cautelar frenó el entusiasmo y, más allá de que se la veían venir, la sentencia del Tribunal volvió a caldear los ánimos entre los seguristas, a punto tal que la propuesta tambalea antes de concretarse, aunque más no fuera, una contraoferta.
Sin embargo, no todo está cerrado sobre este asunto, ya que hoy los seguristas se volverán a reunir y allí decidirán qué respuesta le dan a los tinellistas.
Lo único en que concuerdan ambos bandos es en cerrarle los caminos al presidente de Belgrano, Armando Pérez, quien corre por los palos a caballo del deseo del presidente Macri, quien lo quiere como prenda de unidad.
Así lo hizo saber el nuevo director de Fútbol para Todos, Fernando Marín, quien hace dos días les comunicó a los dirigentes de ambos sectores que el Gobierno veía “con preocupación lo que estaba pasando en la AFA” y que se esperaba que más temprano que tarde, llegaran a un acuerdo.
Dicen que la reunión entre Marín y los dirigentes fue normal pero que, en un momento dado, subió de tono cuando se habló de condicionar el pago de una partida de dinero proveniente del Fútbol para Todos a la solución del entuerto. El que tomó la voz cantante en ese momento fue Hugo Moyano, quien sacó a relucir el barrio y su gimnasia en asambleas camioneras y retrucó sin demasiados eufemismos.
Estamos entonces esperando una solución al tema, que ya ingresó en el oscuro y arduo mundo de la Justicia, con lo que todos sabemos que eso implica. Y esperamos mirando con atención porque, lo más curioso de todo, es que nadie se anima a decir las palabras mágicas: hoy la AFA está acéfala porque el mandato de Segura ya venció. O sea que hoy hay un Gobierno de facto pero sin legitimidad de acuerdo a lo que indican los estatutos de AFA:
“Artículo 10. Presidente. (…) Inciso 2.- El mandato del Presidente dura cuatro años, computables desde el 26 de octubre del año de su elección, hasta el 25 de octubre del cuarto año siguiente y podrá ser reelecto una única vez en forma consecutiva. Si quedara vacante el cargo, corresponderá elegir Presidente por el lapso faltante. La Asamblea para la elección deberá ser convocada dentro de los 60 días corridos de conocida la vacancia definitiva de la Presidencia.”
Y agrega:
“Artículo 7. Autoridades. Inciso 1.- El gobierno de la AFA está a cargo de: a) la Asamblea, que es la autoridad suprema; b) el Presidente. c) el Comité Ejecutivo, que es el órgano ejecutivo; d) el Consejo Federal, que es el órgano ejecutivo respecto del fútbol del Interior, conforme las funciones y atribuciones otorgadas en el presente Estatuto.”
O sea que el mandato de segura venció hace casi dos meses y que, hoy por hoy, y a falta de elecciones, ya debería gobernar la Asamblea o elegir un representante provisorio hasta el nuevo llamado a elecciones.
Digamos también que el engendro de poner a Pérez como presidente tampoco está de acuerdo con el Reglamento General de AFA, que indica en su artículo 50: “Para que pueda ser electo Presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, todo postulante debe ser presentado por uno o más miembros del Comité Ejecutivo en sesión de dicho Cuerpo, por escrito, durante el lapso comprendido entre el 11 y el 30 de septiembre del año de la elección.” O sea que Pérez ya perdió el tren. Recordemos que en aquel momento se quiso presentar pero no consiguió los avales necesarios.
O sea, todo está por verse en este mundo virtual que bien podemos llamar la Asociación del Fútbol Argentino. Lo único que está claro es que la elección del viernes no se realizará y que el pescado está sin vender.