En 1945 la derrota del Eje en la Segunda Guerra Mundial y los posteriores juicios de Núremberg, dejaron a la España de Francisco Franco aislada del mundo, cercada políticamente y a su economía en ruinas y sin perspectivas. El régimen triunfante del Generalísimo surgido tras la Guerra Civil, había simpatizado abiertamente con el Reich, compartido sus modos totalitarios y su ideología fascista. La victoria de los aliados dejó a los españoles a contrapelo de la historia.
A esa castigada España arribó a finales de 1946, el flamante campeón del fútbol argentino, San Lorenzo de Almagro. La gira desde ya perseguía una finalidad deportiva, pero no estuvo exenta de algún cariz político.
La Argentina era uno de los contados países que no se habían sumado al boicot que la comunidad internacional había votado para castigar a España en la Asamblea General de la ONU. El presidente Perón, argumentando que nuestro país tenía una deuda moral con el pueblo español -ya que muchos inmigrantes de ese origen habían contribuido enormemente a la grandeza de la Patria- se comprometió a abastecer el 90 % del trigo que se necesitara en la península. De modo que los cracks de San Lorenzo – por cierto el equipo preferido por los españoles que vivían en la Argentina- fueron recibidos y agasajados, además de como los eximios futbolistas que eran, como si encarnaran a los mismísimos Reyes Magos. La historia de que San Lorenzo había sido fundado por un sacerdote agregaba un ingrediente a la simpatía que despertaba la visita en un país que vivía bajo un régimen ultra católico.
San Lorenzo dio cátedra futbolística. Si bien el nivel general de los españoles era bajo debido a su falta de roce internacional, la superioridad de los sudamericanos fue abrumadora. Sorprendió con su juego asociado, de pases cortos, gambetas y sutilezas al que los locales sólo atinaban a oponer despliegue, esfuerzo y pelotazos. Los españoles deliraron con el estilo de los campeones argentinos y todavía hoy los idealizan.
El punto más alto del viaje fue la victoria en Madrid sobre el seleccionado español por 6 a 1, con el dictador Franco viendo el partido desde la platea. El resumen oficial de es el siguiente:
22/12/46 CASLA 4 vs. Atlético Aviación 1 (Madrid)
25/12/46 CASLA 1 vs. Real Madrid 4 (Madrid)
01/01/47 CASLA 7 vs. Selección Española 5 (Barcelona)
05/01/47 CASLA 3 vs. Athletic Bilbao 3 (Bilbao)
16/01/47 CASLA 6 vs. Selección Española 1 (Madrid)
22/01/47 CASLA 1 vs. Valencia FC 1 (Valencia)
26/01/47 CASLA 0 vs. La Coruña 0 (La Coruña)
31/01/47 CASLA 9 vs. Oporto FC 4 (Oporto, Portugal)
02/02/47 CASLA 10 vs. Selección Portuguesa 4 (Lisboa, Portugal)
06/02/47 CASLA 5 vs. Sevilla FC reforzado 5 (Sevilla)
Resumen: 10 partidos jugados; 5 ganados, 4 empatados y uno perdido. 46 goles a favor y 28 en contra. El partido disputado en Sevilla tuvo carácter de exhibición.
Una reciente publicación de la revista digital española Cuadernos de Fútbol reveló que el equipo argentino disputó otro partido -que no figura en las estadísticas oficiales- frente al Deportivo Gáldacano, equipo regional, de la localidad del mismo nombre, en dónde había nacido Ángel Zubieta, jugador de San Lorenzo que allí se reencontró con su madre. El match se disputó en dos tiempos de 30 minutos y finalizó con el triunfo por 4 a 1 de los azulgranas.
Toda aquella gira, los partidos, los viajes, los momentos de ocio, y la realidad social española de ese momento están registrados en un excelente documental de la televisión española que aquí compartimos y les recomendamos especialmente. Que lo disfruten.
