El 13 de febrero de 1988, Puerto Italiano (antiguo nombre de Puerto Nuevo) venció 1-0 a FC Midland en Libertad con gol de Hugo Yedro. En ese momento, lo más importante de aquel partido fue la capacidad del cuadro de Campana para ganar de visitante y mantener las opciones de pelear el ascenso con Atlético Lugano. Sin embargo, y a pesar de ese triunfo clave, dos fechas después Puerto Italiano vería desde afuera como el conjunto de Tapiales ascendía por primera vez en su historia a Primera C.

Midland pintadaNadie pensaba que ese encuentro entraría en la historia. Ninguno de los cientos de hinchas que se acercaron aquella tarde de verano al estadio Ciudad de Libertad fue consciente de lo que estaba sucediendo en realidad. Esa fue la derrota que marcó el comienzo de la racha invicta más larga de todos los tiempos en el fútbol argentino. Hoy todos hablan de cómo Jorge Sampaoli y Eduardo Berizzo le rompieron el invicto de 40 partidos a Real Madrid, pero pocos recuerdan que en las profundidades del ascenso vernáculo hubo un grupo de jugadores que fueron capaces de hacer lo que Cristiano y sus amigos no pudieron.

Aquel impresionante equipo de Midland estuvo 50 partidos sin perder. Dos de la temporada 1987/88 de la D (victoria frente a Fénix y empate ante Centro Español), 38 de la 1988/89 de la D y diez en la 1989/90 de la C. La impresionante racha finalizó casi 21 meses después, tras un ascenso y muchas alegrías.

Una semana antes del partido contra Puerto Italiano en el que comenzó todo, Lugano visitó Libertad. La hinchada funebrera insultó con todas sus fuerzas a Carlos Ribeiro, el entrenador que se coronó campeón de ese torneo. Lejos de sentirse mal por las puteadas, el DT soltó una frase temeraria y a la vez premonitoria: “no me puteen, porque el año que viene los voy a sacar campeones”. Menos de seis meses después, debutaba en la temporada 1988/89 con un triunfo 2-0 contra Juventud Unida.

En una entrevista con el Diario Olé, el preparador físico Luis Lescurieux recordó la previa del torneo: “El grupo tenía hambre y disciplina. Es más, nosotros comenzamos con la preparación física dos meses antes del inicio del torneo, mientras que los demás lo hicieron una semana antes. ¿Sabes lo que eran estos muchachos? ¡Volaban! Ojo, pero además sabían jugar al fútbol. Acá el que no entrenaba, no jugaba, era así la historia… Teníamos la Selección de la D”.

Midland ganó 28 partidos y empató 10. Fue campeón con un porcentaje récord de puntos. Nunca antes ni después un equipo sacó semejante diferencia en la categoría. Marcó 73 goles y recibió sólo 15. El máximo artillero de la campaña fue Alfredo Villa, con 20 tantos. El plantel lo conformaron: Miguel Zahzú, Oscar Maidana, Raúl Ramirez, Juan Pablo Cardozo, Jorge Moreno, Julio Berón, Luis Vega, Alfredo Villa, Luis Coronel, Eduardo Quintana, Daniel Pin, Gerardo Gil, Juan Montenegro, Guillermo Reyes, Néstor Morinigo, César Carrizo, Juan Carrizo, José Bolívar, Hugo Villarreal, Ramón Pereira, Ricardo Quinteros, Daniel Issassa, Christian Ollero, Oscar Alvarez, Adrián Seoane, Marcelo Orange y Fabián Aguila

Su presentación en la C fue contra Lugano, justamente. Empataron 2-2. Todos ya hablaban del super equipo que jamás perdía. La derrota llegó recién en la jornada 11, cuando Sarmiento de Junín le ganó 1-0 con gol de Germán Melo.