River perdió en el global 2-1 con Independiente del Valle, por los cuartos de final de la Copa Libertadores. Los ecuatorianos siguen en el torneo.
Bayer Munich igualó 2-2 en el global con Atlético de Madrid. El equipo de Cholo Simeone clasificó para la final de la Champions ante el Real Madrid por haber marcado un gol como visitante.
¿Cómo jugaron los equipos? ¿Cómo fueron los partidos?
A nadie le importa. Pasaron Independiente del Valle y Atlético de Madrid. Lo demás es papel pintado. Una paja dirían los más groseros.
Sólo para la estadística consignamos que River creó 23 situaciones de gol en la revancha pero sólo concretó un gol. ¡Son unos giles! Independiente del Valle tuvo 2 oportunidades. Pero River necesitaba 3 goles e hizo uno. A otra cosa.
Agregamos como anécdota: Bayer Munich, también en la revancha, tuvo 16 chances de anotar y concretó 2 goles. ¡Qué pelotudos! Atlético de Madrid fabricó 5 y marcó un tanto. Fue suficiente. ¿Para qué más? Necesitaba perder por poco y convertir como visitante. Lo hizo. Punto aparte.
Por otra parte, no nos olvidemos, estos son partidos de 180 minutos. Los ganan los más inteligentes y los pierden los más zonzos. Y como todos sabemos, el fútbol no está hecho para los zonzos que atacan y no marcan goles.
Otro dato: los hinchas de River y del Bayern despidieron a sus equipos con aplausos. Son tontos. ¿Acaso no se dieron cuenta de que perdieron? O mejor dicho: ganaron pero nos les alcanzó. Pobres. No entendieron nada. No saben nada de fútbol. Son de los que prefieren el fútbol sin arcos. Son líricos, que es lo mismo que decir boludos. Y no nos gustan los boludos.
Uno que otro periodista se animó a hacer el análisis de los partidos. Al cohete. Si los resultados hablan por sí solos. ¿El juego? ¿A quién le importa? ¿Quién sigue en la Copa Libertadores? ¿Quién va a jugar la final de la Champions? A ver… ¿quiénes?
Estamos podridos de los ganadores morales. Queremos ganadores reales. Independiente del Valle y Atlético de Madrid lo son. El River de Gallardo y el Bayern de Guardiola son perdedores. No nos interesan los perdedores. Queremos ser campeones. Siempre. A cualquier precio. Lo demás es puro cuento. Papel pintado.
Queremos ganar. Si hay que jugar feo, mejor. Es más sabroso el triunfo cuando no se merece. Ah… salió la palabrita mágica: merecer. En el fútbol no se merece nada muchachos; se gana o se pierde. El deporte se divide en dos: ganadores y perdedores. El mundo está tapizado de buenas intenciones, pero a nosotros, los que decimos que lo único que importa es ganar, no nos interesan las intenciones. A llorar a la iglesia. Somos pragmáticos.
Lo único que interesa es el resultado. Independiente del Valle a cuartos de final de la Copa Libertadores y Atlético de Madrid a la final de la Champions. Si, ya sabemos. Lo dijimos varias veces. Pero es que eso es lo único que se recordará. Para los vencedores, el Olimpo. Para los derrotados, el infierno.
Por suerte existe el fútbol para recordarnos de vez en cuando quiénes son los vivos y quiénes son los bobos.
La única verdad es la realidad decía el General. Independiente sigue en la Copa y River de ahora en más la va a mirar por televisión. Y el Atlético jugará la final de la Champions mientras que el Bayer se fue para su casa.
Por si quieren reírse un poco de los fracasados que buscaron el gol durante 90 minutos y no lo consiguieron; y disfrutar de los piolas que se defendieron colgados del travesaño y siguen en la Copa Libertadores, les dejamos el compacto de River-Independiente del Valle. La verdad, ni vale la pena que lo miren. ¿Para qué? Si ya saben el resultado.
