En la primera salida de Tití Fernández para contar el banco de suplentes de Brasil, el viernes contra la Argentina, el periodista nombró uno por uno a los futbolistas y a nosotros nos sorprendió el Daglas Costa.

En nuestra reunión de redacción semanal el más malo de todos los malos que trabajan en esta revista, comentó: “¿Escucharon a Tití? Cero fútbol internacional”. Como la mayoría no está en esos detalles y muchos no soportamos los relatos de Vignolo (básicamente porque no se calla nunca) y escuchamos a Garófalo (que tampoco es una maravilla), tuvimos que decir que “no” y preguntar “¿qué dijo Tití?”.

Cuando nos explicó el error de pronunciación de Tití, luego de hacer el chiste obvio sobre si no estaba hablando de Kirk, enseguida todos estuvimos de acuerdo: “Mucho peor es lo de Dunga, que no lo puso de titular”.

Un poquito, sólo un poquito de fútbol internacional, es lo que le pedimos a Tití. Y no se trata de seguir la Liga de Ucrania, donde antes jugaba Douglas Costa. Ahora juega en el Bayern Munich, que lo televisan todas las semanas por la Bundesliga y por la Champions League. Si te gusta el fútbol y no mirás ni una vez al equipo de Guardiola, quizá no te esté gustando tanto.

Pero, otra vez: mucho, muchísimo, peor que lo de Tití es lo de Dunga. ¿No ve al Bayern Munich el técnico de Brasil? Hoy, Douglas Costa está entre los 10 mejores futbolistas del mundo. Y no hubo hincha que lo conociera que no se sorprendiera por no verlo como titular en el Monumental.

Aunque su participación fue decisiva para el gol del empate de Brasil (entró solo por el segundo palo para cabecear el estupendo centro sin recorrido del pie de Dani Alves), lo suyo es el dribbling, ridiculizar en el mano a mano al marcador de turno. Es cierto que el Bayern es capaz de tocar la pelota 40 veces hasta meter un cambio de frente y encontrar a Douglas cara a cara con el lateral, algo que este Brasil no parece estar en condiciones de hacer. Pero, igualmente, de cualquier manera, lo más normal era que Douglas o Daglas estuviera en la cancha desde el arranque.