En las tres ligas más importantes de Europa, cada vez es más difícil que haya sorpresas. En la última década, solo Leicester City pudo patear el tablero y ser campeón en Inglaterra, donde los equipos con mayor poderío económico hacen la diferencia casi siempre. En Italia es aún peor, porque ni siquiera hay un rival capaz de poner en riesgo la hegemonía de Juventus. En tanto, en España Atlético Madrid pudo terciar en la disputa histórica entre los dos clubes más exitosos del mundo. Todo esto solo ocurre en la primera división, porque en la segunda ocurren las sorpresas que no se ven en la elite.
En la temporada 2014/2015, AFC Bournemouth y Carpi y Frosinone lograron el ascenso por primera vez en su historia. Ninguno estaba entre los candidatos al comienzo de curso, sin embargo dieron el batacazo. Esta temporada, ocurrió algo similar. Benevento en Italia y Girona en España debutarán en primera. A ellos se les puede sumar Huddersfield Town y Brighton & Hove Albion en la Premier League y SPAL Ferrara en la Serie A, tres equipos con antecedentes muy lejanos en el nivel superior.
Una de las sorpresas más grandes del año en el fútbol europeo fue la que provocó Benevento Calcio. El club de la provincia de Campania (cuya capital es Napoli) logró el ascenso tras jugar solo un año en la Serie B. En 2016 había logrado su primer ascenso a la segunda división y a lo largo de sus casi noventa años de historia ha tenido más presencia en los torneos regionales y en la Serie D que en las divisiones profesionales.
“Les habíamos prometido a los fanáticos que íbamos a volver a ascender y lo logramos. Creo que nuestro mayor acierto fue haber contratado a Baroni como entrenador”, declaró Oreste Vigorito, presidente del Benevento, quien destacó al entrenador Marco Baroni como uno de los principales responsables del logro. El conjunto de camiseta amarilla y roja ascendió tras vencer a Carpi en la final del reducido.
Benevento Calcio fue fundado en 1929 y, como la mayoría de los clubes del calcio, refundado en varias ocasiones debido a problemas económicos. La última fue en 2005, cuando jugaba en la Serie C2. Tuvo el presupuesto más bajo de toda la Serie B, pero eso no le impidió superar a rivales de la talla de Brescia, Bari, Cesena, Perugia y Vicenza (que además descendió a la
C). En 2017/2018, será uno de los tres conjuntos del sur en la A, junto a Napoli y Crotone.
SPAL 2013 es otro de los recién ascendidos que hizo historia. El club de la ciudad de Ferrara (provincia de Emilia-Romagna) volverá a la Serie A después de casi cincuenta años, ya que su última temporada en la elite había sido 1967/1968, con Fabio Capello como futbolista. Y llega como campeón.
Fundado en 1907, en 2013 el club estuvo a punto de desaparecer, pero se fusionó con Associazione Calcio Giacomense y cambió su nombre a Sociedad Polideportiva Ars et Labor (SPAL) 2013. Walter Mattioli se convirtió en el nuevo presidente e intentó encarar una revolución que termina en la Serie A. La llegada del director técnico Leonardo Semplici a fines de 2014 fue fundamental para esto.
En 2012/2013, SPAL estaba en la Serie D, la quinta división del fútbol italiano. Ese mismo año ascendió a la Lega Pro Seconda Divisione (cuarta) y un año después llegó a tercera. Al igual que Benevento, accedió a la Serie B en 2016 y completó su meteórico ascenso hace algunos días. Una de las principales figuras del plantel es Gianmarco Zigoni, el hijo de Gianfranco, un legendario crack de los setenta.
El ascenso de Girona en España fue histórico pero no tan sorprendente. El club catalán es un protagonista habitual de la segunda división, pero nunca había podido terminar de cumplir el objetivo de llegar a la Liga por primera vez en sus 86 años de historia. Gracias a su gesta, Catalunya volverá a tener tres representantes después de once años, cuando a Barcelona y Espanyol los acompañó Gimnastic de Terragona.
Girona es una de las cuatro provincias que forman la comunidad autónoma de Catalunya, junto a Tarragona, Barcelona y Lleida. Era la única que aún no había tenido un club en la elite del fútbol español y durante décadas ese sueño fue una verdadera utopía, ya que el conjunto de camiseta blanca y roja a bastones se debatía entre la segunda división B (tercera categoría) y la Tercera división (cuarta).
En la temporada 2007/08, Girona llegó a Segunda después de 49 años en el ascenso profundo. Eso marcó un cambio estructural en el club, que se profundizó cuando el empresario catalán Josep Delgado se hizo cargo del club. En los últimos seis años, el equipo estuvo a punto de ascender tres veces, hasta que lo logró hace pocos días. Antes, perdió una semifinal ante Real Zaragoza y finales contra Almería y Osasuna.
En Inglaterra no habrá ningún debutante absoluto, pero sí dos regresos espectaculares. Huddersfield Town ganó en Wembley “la final de los 200 millones” y volverá a la división de honor después de 46 años. Se la denomina de esa manera a la final del recucido por el tercer ascenso a la Premier League porque jugar en esa categoría la representa a cada club un mínimo de 200 millones de euros, algo que la mayoría de los hinchas de esto modesto club de West Yorkshire ni soñaba algunos años atrás.
A pesar de un pasado reciente en las profundidades del ascenso, Huddersfield Town tiene una historia gloriosa. Es uno de los cuatro equipos que fueron tricampeones nacionales, junto a los gigantes Arsenal, Liverpool y Manchester United. Es que ganó la First Division, antecesora de la Premier, en 1924, 1925 y 1926. Después de aquella gesta, no pudo mantenerse en la elite a pesar de haber contado con futbolistas como Denis Law o Peter Doherty y entrenadores como Bill Shankly.
Su caída en la década del setenta fue vertiginosa, porque en 1978 llegó a deambular por la mitad de tabla de la cuarta división, sitio al que volvió en 2004. En 2012 ascendió al Championship (segunda división) y allí se mantuvo a pesar de contar con uno de los presupuestos más bajos. Esta temporada logró el ascenso tras un espectacular comienzo que coronó con la victoria sobre Hull City en Wembley, ante 90.000 espectadores.
Lo acompañará en la Premier League Brighton & Hove Albion, el nuevo representante del sur inglés en la máxima categoría. Al igual que Giron, Brighton supo pelear bien arriba en los últimos años y el ascenso es consecuencia de un trabajo serio. Bajo la dirección técnica del inglés Chris Hughton y jugando en un moderno estadio recién construido, espera ahora hacer un digno papel en la Premier.
Las Gaviotas pasaron la mayor parte de su historia en el ascenso, aunque entre 1979 y 1983 jugaron en la primera división y en 1983 perdieron la final de la FA Cup contra Manchester United. Luego, vinieron décadas de penurias, con venta de estadio y múltiples descensos. Tocaron fondo en la segunda mitad de la década del noventa, cuando estuvieron a punto de descender a la quinta división. En 2001 Brighton ascendió a tercera y en 2010 a segunda.