Nosotros ya no entendemos nada. En la mesa de café nos agarrábamos la cabeza, directamente no lo podemos creer: en la AFA quieren echar a Bauza, que va a ser campeón del mundo en Rusia 2018. ¿¡Cómo puede ser!? ¿En serio vamos a echar al DT campeón del mundo, tan cerca de que arranque la Copa? ¿Es que no se dan cuenta de lo que cuesta ganar un Mundial? No se puede ser tan obtuso y dejar pasar semejante oportunidad.
Hace años, pero muchísimos años que es el máximo objetivo de la Selección. Penal que no fue en el 90. Me cortaron las piernas en e 94. Bergkamp en el 98. Primera ronda en 2002. Cuartos contra Alemania en 2006 y 2010. Final en 2014. Todo un parto. ¡Y ahora como si nada le damos la espalda a esa consagración que nos viene esquivando desde el 86! No “volveremos, volvermos otra vez” porque somos necios.
Bauza ya dijo varias veces que se va a quedar con el título, contra un equipo europeo para más datos (¿Islandia, quizá? No aclaró). Incluso se puso un poco nostálgico del futuro cuando razonó que no sabía bien a qué iba a dedicarse después de ser campeón mundial. Y dicen algunos colegas que detalló el recorrido del colectivo desde Ezeiza en el regreso triunfal desde Rusia (no pasaría por Olavarría).
Sin embargo, el recientemente empoderado Chiqui Tapia quiere sacarlo de la dirección celeste y blanca. Le critica el juego, por ejemplo. ¿A quién le importa el juego si vamos a salir campeones del mundo? ¡DEL MUNDO! Después vemos lo del juego… ¡Por favor! No se puede creer: armamos semejante quilombo por un par de Copa Américas esquivas, pero cuando viene la cita grande, sacamos al tipo que va a ser campeón. La verdad, después de tres finales perdidas es estúpido. Hay que bancarlo como mínimo hasta que gane el Mundial. Después hagamos lo que quieran.
¿No podrían esperar un añito para cambiarlo? Por lo menos para darle una alegría al hincha, a la gente que siguió tanto a este equipo. Además, no estamos seguros de que el Patón fuera tajante en cuanto a que sería monarca mundial con Argentina. A lo mejor es con otro equipo. Miren si, en una de esas, el tipo se va a otro seleccionado. Si cae, supongamos, en su viejo y querido Ecuador, el país que lo vio campeón de la Libertadores. ¿Preferimos verlo levantar el trofeo de FIFA con los de casaca amarilla?
Es insólito lo de nuestra dirigencia. Ante tanta duda, ante la incertidumbre cotidiana, queremos sacarnos de encima al único tipo que nos trae una certeza. Bauza va a ser campeón y nuestra AFA querida prefiere ir a buscar a otro.
Dejá, che. Dejá. En la mesa de Un Caño no entendemos más nada.