Uruguay siempre fue una fábrica de futbolistas de nivel mundial a pesar de contar con 3 millones de habitantes, apenas la cuarta parte de Sao Paulo, ciudad donde la “Celeste” se jugará hoy ante Inglaterra (21.00 horas) buena parte de sus opciones en el Mundial de Brasil Sin embargo, resulta aún más milagroso que los dos delanteros que tendrán la urgente misión de marcar goles a Inglaterra, los internacionalmente famosos Luis Suárez y Edinson Cavani, nacieron en Salto, una pequeña ciudad del interior uruguayo que no supera las 100.000 personas. Como la localidad keniata de Iten en el valle de Rift, o el minúsculo pueblo de Bekoji en Etiopía, de donde surgen los mejores fondistas del planeta, la uruguaya Salto debe ser la ciudad con la mayor proporción de goles por kilómetro cuadrado del mundo. Para más casualidad, los vecinos Suárez y Cavani nacieron con apenas 21 días de diferencia y vivieron a seis manzanas de distancia. «Ante Inglaterra llegó la hora de demostrar el carácter que nos hizo conocidos a los uruguayos», comentó Suárez, la mayor celebridad de Salto, que con 31 tantos en el Liverpool fue el máximo goleador de la Premier League. «Es una final y tenemos que ganarla», coincidió su vecino de infancia y también goleador de torneos europeos, Cavani, que en la liga italiana 2012-13 sumó 29 tantos en el Nápolez y se convirtió en el primer uruguayo en 72 años en ser el máximo anotador del Calcio. Ya en la última temporada, traspasado a Francia, el salteño sólo fue superado por su compañero del Paris Saint Germain Zlatan Ibrahimovic. El sueco anotó 26 tantos y luego le siguió el uruguayo, con 16. Final ante Inglaterra Pero Suárez y Cavani son también garantía de gol en la “Celeste” y a ellos apuesta Uruguay para la final anticipada ante Inglaterra. El delantero del Liverpool lidera la tabla de goleadores de la historia de la selección uruguaya, con 39 dianas, mientras que Cavani suma 22, incluido el único de la “Celeste” en el debut en el Mundial, la derrota 3-1 ante Costa Rica. Suárez, que no jugó en el inicio del Grupo D, ya está recuperado de la operación que sufrió en la rodilla izquierda el 21 de mayo y entrará por Diego Forlán para conformar una dupla cien por ciento salteña. “Se viene un Salto mortal” fue el titular elegido el martes por el diario uruguayo “El País”. El matutino recuerda que, sumadas todas las competencias de clubes y selecciones en la última temporada, los Suárez y Cavani anotaron 62 goles. De todas las selecciones del Mundial, esa cantidad solo es superada por la dupla argentina, Lionel Messi-Sergio Agüero, que entre Barcelona, Manchester City y la albiceleste convirtieron 72. El fenómeno de Salto como proveedor de goles internacionales llamó la atención del diario inglés “The Telegraph”, que desde Londres envió a un periodista a la modesta ciudad fronteriza con la argentina Concordia y ubicada a 300 kilómetros de la capital uruguaya, Montevideo. Generación del 87 “Los dos talismanes uruguayos sólo tienen 21 días de diferencia y vivieron a seis manzanas uno de otro”, publicó el martes el diario inglés en relación a que Suárez nació el 24 de enero de 1987 y Cavani tres semanas después, el 14 de febrero. Sin embargo, en un contexto de decenas de canchas de fútbol diseminadas por Salto, los familiares de ambos jugadores no recuerdan si los pequeños Luis y Edinson se enfrentaron en algún partido de juveniles. “Tal vez sí, tal vez no”, dudaron Sergio Suárez y Luis Cavani, tíos de Luis y Edinson. “Hay más de 100 equipos de diferentes niveles en todo Salto”, se sorprendió “The Telegraph” por la fiebre del fútbol en ese rincón del oeste uruguayo. Suárez se mudó muy joven a Montevideo, a los 7 años, cuando sus padres consiguieron trabajo en la capital. Según el libro “Vamos que vamos, un equipo un país”, de Ana Laura Lissardy, el cambio fue traumático para Suárez, que estaba acostumbrado a jugar sin calzado. “Veníamos a una ciudad donde era imposible jugar descalzo en el césped. Eso me costó mucho”, contó Suárez, que a los pocos años comenzó a jugar para Nacional de Montevideo. Tiempo después, Cavani también se mudó a la capital y fichó por Danubio. Faltaba poco para que ambos se convirtieran en los embajadores de Salto en el mundo. En Salto también nacieron otros dos referentes de la selección, aunque ninguno delantero. El mediocampista José Andrade, el primer gran futbolista negro de la historia, fue el capitán del primer campeón mundial, en 1930. También es salteño el único uruguayo que jugó cuatro Mundiales, Pedro Rocha, entre 1962 y 1974. Si los Mundiales fuesen de ciudades en vez de países, la humilde Salto podría consagrase campeona mundial. O al menos optaría seguro al título de máxima goleadora.
Fuente: abc.es