Son 28 cuadras, con sus correspondientes cortadas. Ayer me pasé buena parte del día analizando el mapa, recorriendo con el dedo cada detalle de Brasil. Y me propuse atravesarla toda, desde Sánchez de Loria, donde nace, hasta Puerto Madero. O al revés, si nos guiamos por la numeración. Tengo un mes enterito por delante para vivir el Mundial por toda la geografía de esta calle. Digamos que para cuando llegue la final, Brasil no tendrá misterios para mí. Ni para ustedes, si siguen esta columna que con tan buen criterio se les ocurrió a los de Un Caño.

Aunque no sé si será tan fácil para mí sostener esta cobertura. Ayer nomás, un ratito después de que terminara el partido inaugural, me llegó un mail de la redacción sugiriéndome que me cuidara de dar pronósticos, que podíamos perder prestigio si erraba mucho. Todo porque había anticipado un empate de Croacia. ¡Como si yo tuviese la bola de cristal! No, lo que tengo son conocimientos, estudio, análisis. Pero de los jugadores, no de los árbitros.

Pero volviendo al mail, no me gustó, me sonó a apretada. Lo firmaba Caravario, prosista refinado, un conocido bon vivant que de pronto se puso rígido. Le contesto por acá para que de entrada le quede clarito que a mí no me van a joder. Que no afecte mi libertad de expresión porque llamo a la SIP, conozco gente ahí.

El match (la palabra es un homenaje a La Nación) lo vi en un bar de Brasil y Defensa, en San Telmo, a media cuadra de la pensión donde monté mi centro de operaciones para esta cobertura. Una cama y baño compartido, bah. El bar se llama Británico, y en la guía turística que me traje de Ameghino figura como “tradicional”. Será por las mesas de madera, por la barra alargada, o por el estilo de las letras que señalan el nombre del lugar en los vidrios. Pero sacale la palabrita, hermano: un bar donde no se mira fútbol no puede ser tradicional. ¡Donde no se mira el Mundial! Les tuve que pedir que cambiaran el canal, estaban con un documental del History Channel sobre los museos de Londres. Al final hice buenas migas con el mozo, quedamos que mañana vuelvo para ver a Inglaterra. Ese sí les debe interesar a los dueños.

Día 2. Hoy Chile golea a Australia, el partido del día que verdaderamente importa.