El gobierno de Mauricio Macri avanza en su intención de establecer las Sociedades Anónimas deportivas y sumó a un aliado inesperado: Daniel Scioli. El pacto entre los adversarios en las elecciones presidenciales 2015 se cerró con una oferta para darle la presidencia de la Comisión de Deportes de Diputados al hombre del FPV a cambio de que haga lobby para que salga a ley cuanto antes.
El jueves 1º de marzo, el presidente Mauricio Macri dará el discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso para el año 2018. Entre los inesperados aliados que tendrá el líder de Cambiemos, hay uno cuya fidelidad cerró esta semana. Se trata de Daniel Scioli, justamente quien fue su oponente en las elecciones presidenciales en 2015 como la imagen visible del Frente para la Victoria.
Lejos del antagonismo ultranza que se plantea desde ambos lados de la grieta, Macri y Scioli están más cerca de los que sus etiquetas políticas pudieran sugerir y han transitado una vida política en paralelo, con escasos momentos de cruces (como en la campaña de hace dos años) y varios de encuentro. Hasta se dieron el gusto de mostrarse ante las cámaras “jugando” un partido de futsal en Mar del Plata en enero de 2012.
El exvice de Néstor Kirchner se reunió en los últimos días dos veces con Carlos MacAllister (Secretario de Deportes de la Nación) para cerrar el acuerdo que los tendrá como socios políticos en los próximos meses. Cambiemos aceptó que Scioli sea presentado como presidente de la Comisión de Deportes de Diputados (un cargo que ya ocupó entre 1997 y 2001) a cambio de que el fundador de La Ñata Sporting Club fogonee la aprobación de la ley de sociedades anónimas deportivas que Macri intenta imponer desde fines de 2017 con Fernando Marín como consejero y planificador tras haber liquidado en julio de 2016 el programa Fútbol Para Todos y privatizar los derechos del fútbol local.
Scioli no es ajeno a los intentos privatizadores en el fútbol. De hecho, cuando era un cuadro político del Menemismo, en 1999, intentó imponer su proyecto de creación de SA en el fútbol, mientras Macri ganaba lugar en los medios al frente de Boca Juniors tras fracasar su gestión de 1993 cuando quiso gerenciar a Deportivo Español y mudarlo a Mar del Plata. En 2001, durante el sexto año de sus 12 en el mandato Xeneize, Macri había realizado una ostentosa conferencia de prensa en la sala de prensa de La Bombonera para dar a conocer su proyecto de ley, una operación que quedaría en la nada por la crisis institucional de diciembre de aquel año.
Macri, que obvió la aplicación de la Ley del Deporte Nº 27.202 (sancionada y promulgada en noviembre de 2015) y la 27.201 (que disponía el pago de la AUH Deportiva), ahora busca un respaldo legal para que los empresarios saquen otra tajada más del fútbol nacional.
Artículo publicado en el portal Olímpicos Argentinos.