Argentino de Quilmes, el primer club fundado por argentinos de la historia, es desde hace más de una década una sociedad anónima de hecho. No hay ningún documento que confirme esto y las luces de los medios nacionales están lejos de esta circunstancia, pero sus hinchas y socios, desesperados, protagonizan una lucha contra un poder que los supera día a día. Pero no se rinden.
Este jueves habrá una asamblea que puede marcar un antes y un después. Es necesario que su situación sea visibilizada, por eso dialogamos con Pablo, integrante de la agrupación Celeste y Blanca que motoriza la lucha en favor de la función social del club.
-¿Quiénes son hoy las autoridades de Argentino de Quilmes?
El actual presidente del club es Daniel Zisuela y su vicepresidente Julio César Sosa. Zisuela es dirigente del UTHGRA, empresario gastronómico y Concejal en Florencio Varela. Basta googlear su apellido para encontrar parte de su prontuario. El hecho más destacado es la imputación en una causa por el trabajo esclavo de unas 200 personas en quintas de su ciudad, al hecho se lo conoció como “La voz del campo”.
-¿Hace cuanto están en el club?
A Zisuela lo trajeron como gerenciador del fútbol en el año 2004, en la gestión del presidente (Omar Luis) Daer. Era el representante de una empresa denominada Proyecciones Deportivas que también tuvo vínculos con San Martín de Burzaco. A los dos años, Daer se retiró y, ante la acefalía, Zisuela y gente del UTHGRA se apoderan de la institución.
-¿Cómo hicieron para quedarse, hubo elecciones?
Seis meses después, ante una Asamblea de socios los sindicalistas mostraron su verdadera cara. Dejaron de ser los salvadores del club, que ‘venían a invertir para llevarnos a jugar el Nacional B’, y trajeron una patota armada que expulsó a patadas a los socios que les decían que no podía gobernar de facto, sin la antigüedad que reclama el Estatuto y sin elecciones. Así comenzó el primer mandato de Zisuela. Desde entonces él se desenvuelve en la política varelense y deja en manos de su brazo armado, Sosa, los destinos del club.
-En ese contexto, ¿Cómo funciona políticamente el club?
No funciona. En Argentino de Quilmes no hay Comisión Directiva, solo nombres de socios verdaderos que son utilizados o comprados con favores. Zisuela es quien decide qué y cómo se hace. Mucho menos existe una representación para las minorías en dicha inexistente CD.
-¿Tampoco hay asambleas de socios?
Las Asambleas son anuales pero solo se trata el Memoria y Balance. Ahí se mueve el aparato del sindicato para amedrentar a los opositores y garantizar que se aprueben esos balances escandalosos. El resto del año, entre asamblea y asamblea, son Sosa y un puñado de matones armados del UTHGRA los que amenazan a quien se les pase por delante. Llegaron a traer barras de otros clubes cuando la situación parecía salirse de su curso.
-¿Cómo definen lo que está pasando en su club?
La figura que mejor describe lo que sucede en Argentino de Quilmes es: ‘Vaciamiento’. Hace 15 años nuestro padrón incluía 2.500 socios. En la actualidad, según declaraciones periodísticas de Sosa al diario Olé, es de solo 350 socios. Pero no hay un padrón para corroborarlo.
-¿No existe o ustedes no tuvieron acceso?
Nunca nos dieron una copia. Hicimos reiterados pedidos, mandamos cartas documento, fuimos con un Escribano, etcétera, pero nada. Dicen que se los robaron, que los están reconstruyendo. Es una maniobra típica de las burocracias sindicales para fraguar padrones y perpetuarse en el poder. ¿Cómo podemos participar de elecciones o de Asambleas donde no se sabe con cuántos votos se gana, quiénes pueden ser candidatos, cuál es el quórum para sesionar?, y muchos etcéteras más.
-¿Porqué creen que están vaciando al club?
El predio se encuentra en la zona inmobiliaria más codiciada de Quilmes. Siempre fuimos un club que nos destacamos por nuestra vinculación con el barrio. Miles de hinchas de Quilmes AC pueden atestiguar lo que eran los veranos en la pileta de los Mates. Los jugadores de toda la región se probaban en Argentino porque sabían que tenían posibilidades de ascender. El Basquet competía por ascender al TNA en el mejor microestadio de la región, hoy tristemente abandonado. Innumerables actividades se tuvieron que mudar a Sociedades de Fomento del barrio.
-¿No hay más deportes que fútbol en Argentino?
El club llegó a tener cero actividades. El último año, y por nuestras denuncias, se hicieron actividades fantasmas como baseball. También se jactan del tenis. Las canchas de polvo de ladrillo estuvieron abandonadas por años y hace un par de meses nos desayunamos con que se estaban ‘acondicionando’. Al averiguar, descubrimos que se habían gerenciado y que se utilizarían para torneos empresariales. No se sabe cuanto pagan por eso. Patín artístico también es una actividad que se vende como propia pero que en realidad alquila las instalaciones y que no brinda ningún beneficio a los pocos socios que quedan.
-Y con respecto al fútbol ¿cómo es la situación de las divisiones inferiores?
Las inferiores dan pena. Son sustentadas por los propios padres de los jugadores, a quienes no solo se les cobra por jugar sino que también por los traslados y todo lo que se les pueda imaginar.
-¿Su agrupación surge a raíz de todo esto?
Desde 2014 iniciamos un proceso de politización con un único y claro objetivo, recuperar el club. Que vuelva a manos de los socios. Desde ese momento existe la Agrupación Celeste y Banca, la que integro. Desde mitad de 2016 se potenció este enfrentamiento entre la patota del UTHGRA y los socios. Nuestra agrupación creció mucho y se consolidó como una opción real.
-Si hubiera elecciones en el club, ¿creen que las ganarían?
Creemos que Zisuela no podría armar lista para presentarse. Sin dudas lo venceríamos y es por eso que recurre a fraguar padrones. Nuestra política es clara, apostamos a un Frente de Unidad que borre todas las diferencias y que tenga como único objetivo la recuperación del club. Necesitamos refundar Argentino en honor a nuestra historia.
-¿La asamblea anual, que se realiza este jueves, puede iniciar esa refundación?
Tomamos la asamblea como un paso más en nuestro camino y una nueva oportunidad para desenmascarar a quienes se han apropiado de nuestro club. Los socios truchos ya fueron convocados. Según rumores 250 personas acudirán con carnets falsos, a cada uno le habrían ofrecido 800 pesos para ir. Desde la Agrupación Celeste y Blanca llamamos a los socios e hinchas a no ceder ante la intimidación y a participar de la asamblea, pero también de un banderazo previo.
-¿Creen que sus reclamos y los de otros socios intranquilizan al oficialismo?
Zisuela viene muy vapuleado. Sosa salió en los medios nacionales golpeando y amenazando a socios. La misma semana, trataron de incendiar el local y la casa de uno de esos mismos amenazados. Todo esto se suma a que la gente por primera vez se expresó masivamente, en el último partido de local, contra la CD y UTHGRA. La protesta fue reprimida brutalmente por la policía a pedido de Zisuela.
-¿El fútbol es uno de los pocos lugares donde pueden manifestarse?
Argentino de Quilmes nunca jugó de local un fin de semana en todo este campeonato. Desde la Mesa de la C nos comentan que es por pedido expreso del club. Lo hacen porque tienen miedo a las reacciones populares y como plan para expulsar al socio. ‘¿Si el club no me da actividades, si los partidos se juegan un lunes a las 15.30, si puteo y me mandan a pegar, para qué voy a pagar la cuota?’. Lamentablemente muchas personas piensan de esta manera.
-¿Qué pretenden que cambie en el club a partir de hoy?
La asamblea es solo una muestra de lo que es el club hoy. Quienes asistan tendrán una foto de lo que se vive en Argentino de Quilmes. El vaciamiento que denunciamos tiene que ver con lo económico, con las actividades que ya no existe, con la expulsión de la masa societaria, pero el peor mal que aqueja a la institución es la falta de democracia real. Nada va a cambiar mientras no se logre una representación real de las partes involucradas. Mientras tengamos una democracia hecha a medida y controlada por UTHGRA los socios seguiremos siendo rehenes en nuestra propia casa.